Al vivir con diabetes es común que escuches a tu médico o educador en diabetes decir que evites “situaciones de estrés”, debido a que podría afectar tus niveles de glucosa. Si bien pareciera una instrucción simple, lograrlo es mucho más complejo de lo que parece.
La realidad es que día a día nos enfrentamos a distintos estímulos y situaciones que pueden desatar estrés. Por lo tanto, más allá de evitar sentirlo, habría que aprender a manejarlo e identificar cuáles son esos estímulos que lo provocan.
El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones que interpreta como “amenazantes” o que te ponen en “peligro”. Cuando tu organismo se identifica en esta situación automáticamente aumenta la segregación de energía almacenada (glucosa y grasa) y la pone a disposición de las células con el objetivo de ayudar a tu cuerpo a alejarse del peligro.[1] Para una persona que vive con diabetes este aumento de energía, y por lo tanto de glucosa, puede resultar complicado, ya que la insulina no es la suficiente para contrarrestarla.
El impacto del estrés en los niveles de glucosa varía de acuerdo con la persona y la diabetes, como bien sabemos, todas las diabetes son diferentes y este caso no es la excepción. El estrés podría ocasionar que tus niveles de glucosa suban o disminuyan, sin embargo, la solución a esto es aprender a identificar patrones:
• Antes de cada medición de glucosa haz una autoevaluación y numera del 1 al 10 el nivel de estrés que sientes en ese momento
• Anótalo a un lado de tu medición.
• Después de una semana o dos evalúa tus anotaciones y fíjate si hay algún patrón respecto a tus niveles de glucosa en sangre y el estado de estrés en el que te encontrabas.[2]
Conocer estos patrones te podrá ayudar a identificar las reacciones de tu cuerpo y cómo atenderlas. Pero ¿Cómo podemos regresar a un estado de relajación? A continuación, te contamos algunas de las muchas técnicas que existen para poder tranquilizarnos y calmar el estrés:
Respiración de caja
Esta técnica trabaja con el sistema nervioso autónomo, aquel que funciona sin que te des cuenta, es el responsable de que tu corazón lata o respires de manera automática. Este mismo sistema es el que reacciona cuando percibe una situación de peligro y puede llegar a provocar estrés.
Por medio de este ejercicio se pretende “engañar” al sistema nervioso, bajo el racional de que, si la respiración es profunda, pausada y rítmica, quiere decir que todo está bien. ¡Pruébalo!
Técnica de relajación de Jacobson[1]:
Esta técnica fue desarrollada por el psicoanalista Edmund Jacobson y tiene por objetivo la relajación progresiva de nuestros músculos. Se divide en tres fases:
¡Así que ya lo sabes, conoce tu cuerpo y cuídalo!
Referencias:
[1] https://tododiabetes.mx/2021/01/26/mis-niveles-de-glucosa-y-el-estres/#_ftnref1 Asociación Americana de Diabetes, Estrés, Disponible en: http://archives.diabetes.org/es/vivir-con diabetes/complicaciones/estres.html http://archives.diabetes.
org/es/vivir-con-diabetes/complicaciones/estres.html
[2] https://tododiabetes.mx/2021/01/26/mis-niveles-de-glucosa-y-el-estres/#_ftnref2 Ibídem
[3] Universidad de Almeria, Programa autoaplicado para el control de la ansiedad ante los exámenes, Relajación Progresiva deJacobson, Link:https://w3.ual.es/Universidad/GabPrensa/
controlexamenes/pdfs/capitulo08.pdf
https://w3.ual.es/Universidad/GabPrensa/
controlexamenes/pdfs/capitulo08.pdf